En general el blog esta constituido de observaciones y anécdotas junto a narraciones aun no publicadas que deseo compartirlas con ustedes estimad@os lector@s. El blogs está contruido como tomas de posición del autor ante hechos y circunstancias del cotidiano.
En este blog usted encontrará el lector escritos del Dr. Guillermo Carvajal Alvarado. Presento en este blog algunos cuentos y poesías, a la he dedicado parte de mi vida como académico.
SOMOS EDITORIAL Y LIBRERÍA ALMA MATER.
LIBROS, PANFLETOS PUBLICITARIOS, DIAGRAMCIÓN Y ARTES GRÁFICAS. ESTAMOS EN SAN PEDRO CALLE DE LOS GRAFFITIES.
En este blog usted encontrará escritos de Guillermo Carvajal Alvarado, aquí presentó la narrativa a la he dedicado parte de mi vida. Son obseervaciones, anécdotas y narraciones aun no publicadas que deseo compartirlas con ustedes estimad@os lector@s
NADA COMO AQUELLAS MEJENGAS
Guillermo carvajal Alvarado
Escritor (Grupo Escro)
La mejenga o fútbol de la calle fue la forma de socialización más popular de los niños en los barrios urbanos en la década de 1960 y 1970 y 1980. La mejenga fue una forma de diversión muy típica de los niños urbanos de los pueblos del Área Metropolitana de San José. La mejenga requería que dos equipos con un indeterminado número de jugadores generalmente más de 6 jugadores, aunque podía jugarse con menos. Si era importante la edad aparente de los contrincantes, puesto que por ser un deporte físico la edad podía hacer diferencia.
Se requería de un balón de fútbol, generalmente se usaban balones número 5. Aunque en ausencia de un balón la imaginación podía llevarse hasta construir un objeto más o menos esférico con trapos o cualquier tejido manipulable. La mejenga se jugaba bien en la calle o bien en un terreno preparado específicamente para esta actividad. Como todo juego tenía unas reglas en que los participantes convenían y un número de jugadores admitidos y el tamaño de las mejengas podía varias desde dos contra dos hasta 11 contra 11 ya estilo partido de fútbol.
Luego para determinar la longitud del campo de juego se colocaban las porterías que podían ser dos piedras o si el terreno lo permitía de clavaban estacas. La distancia generalmente no depasaba los 40 metros y si la distancia se consideraba larga se podía recortar esta misma de común acuerdo entre los rivales. La anchura lo determinaba el tipo de terreno si era en la calle dependía si era una calle ancha o angosta entre 3 metros y 6 metros de ancho.
Los capitanes se ponían de acuerdo con las reglas que se iban a aplicar en cada mejenga. Como todo juego era organizado, tenía sus reglas para jugarlo y para determinar el ganador, y el objetivo era siempre que hubiese un ganador.
Las mejengas diarias y de las mejengas institucionalizadas los días sábados que eran apostadas y que se jugaban por las tardes en la Finca de los Solano, que eran cafetales abandonados donde se había construido algo que se denominaba plaza, en realidad lo que se hacía era jugar con la superficie sin ninguna tipo de gramilla, en la pura tierra.
El fútbol urbano de la calle se expandía, requería de muy pocas cosas: un par de piedras que hacían de marcos y un grupo indeterminando de niños que debía ser similar por equipo, para distinguirse uno se quitaban la camisa y los otros se quedaba con la camisa que andaban puesta. Se jugaba hasta alcanzar un número de goles. Ambos equipos se ponían de acuerdo en el número de goles. Los goles por alto no se valían debían ser raseros que no hubiera duda que habían atravesado las piedras o lo que señalara que era los marcos.
Y no es que haya desaparecido como forma de juego, pero con la primacía de los automotores las calles se han vuelto muy inseguras y la frecuencia con que pasan los vehículos hace difícil estar jugando y tener que detenerse a cada momento que pasa un automotor. Y luego la urbanización de la mayor parte de las tierras del área central de país ha privado a muchos barrios de espacios recreativos.
En general el blog esta constituido de observaciones y anécdotas junto a narraciones aun no publicadas que deseo compartirlas con ustedes estimad@os lector@s. El blogs está contruido como tomas de posición del autor ante hechos y circunstancias del cotidiano.
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